Extracto de
Canto a la Argentina
Por Rubén Darío
¡Cantad, judíos de la pampa!
Mocetones de ruda estampa,
dulces Rebecas de ojos francos,
Rubenes de largas guedejas,
patriarcas de cabellos blancos,
y espesos como hípicas crines;
cantad, cantad, Saras viejas
y adolescentes Benjamines,
con voz de vuestro corazón:
¡Hemos encontrado a Sión!
Extracto de
Sabatión Porteño
por César Tiempo
Oleaje rubio. Vértigo. Folía.
Canto a la Argentina
Por Rubén Darío
¡Cantad, judíos de la pampa!
Mocetones de ruda estampa,
dulces Rebecas de ojos francos,
Rubenes de largas guedejas,
patriarcas de cabellos blancos,
y espesos como hípicas crines;
cantad, cantad, Saras viejas
y adolescentes Benjamines,
con voz de vuestro corazón:
¡Hemos encontrado a Sión!
Extracto de
Sabatión Porteño
por César Tiempo
Oleaje rubio. Vértigo. Folía.
Bajo el látigo azul de las auroras
bullen las calles de la judería.
Pasan lentas muchachas seductoras,
zumba la jerga de los trafagones
y entre la vibración de las sonoras risas
estallan las interjecciones
cuando los hijos de Israel realizan
con el agua solar sus abluciones
Extracto de
Noche hiemal en el ghetto
Por César Tiempo
Extracto de
Noche hiemal en el ghetto
Por César Tiempo
…surcan los ríos de asfalto
Los lacrozes somnolientos.
Transgresores circuncisos
del séptimo mandamiento
naufragan en la luz fatua
de los zaguanes magnéticos
…Un gato gime de amor
desde el alar de su imperio
Jehová sonríe piadoso
bajo sus barbas de cielo
Extracto de
Nacimiento del Sábado
Por César Tiempo
Sábado de la pausa-
Extracto de
Cementerio Israelita
Por César Tiempo
Sordas al hervidero de la calle, felices
Extracto de
Nacimiento del Sábado
Por César Tiempo
Sábado de la pausa-
Schabbat-del armisticio
de la renovación-chadasch-de luna
nueva-neomenia-para la fortuna
de quien aspira, lejos del bullicio.
buscar asilo en la misericordia
del ocio activo, de la paz sagrada.
y de espaldas a vértigo y discordia
amar a Dios y no pensar en nada.
Extracto de
Cementerio Israelita
Por César Tiempo
Sordas al hervidero de la calle, felices
en su modorra y libres de todo desvarío,
reposan cara al mundo con sus corvas narices
estas almas cesantes del realengo judío.
Fondeadas ya las naves definitivamente
tras de la travesía por caminos sin vuelta
se hicieron estos lechos y esta ciudad yacente
para dormir el sueño postrer a pierna suelta.
Los ayes de las viejas con su dolor ruidoso
no turban este mundo supino, satisfecho.
donde arden los compases del moles quejumbroso
cantado a precio fijo con sus golpes al pecho.
Danzan aquí los días su ocio pausadamente,
da la palingenesia de las flores su gracia
y convertido el schnórrer en un terrateniente
también está en el suelo junto a la aristocracia.
Mientras las noches lucen sus condecoraciones
sobre la calma espesa de la ciudad enana,
la grey semita duerme sin vanas ambiciones
confiando que la vida no empezará mañana…
